Kellogg abandona el mercado venezolano

infoRETAIL.- La situación económica y social que atraviesa Venezuela se ha cobrado una nueva víctima en el sector del gran consumo. Se trata de Kellogg, que ha anunciado el cese inmediato de sus operaciones, tras más de medio siglo en el país.

La reacción del presidente venezolano, Nicolás Maduro, no se ha hecho esperar y ha pedido a la Interpol la detención de los dueños, al afirmar que estos cerraron la filial de forma “inconstitucional e ilegal”.

En concreto, la filial de la multinacional norteamericana que opera en Venezuela, denominada Alimentos Kellogg, ha comunicado el cierre con un aviso colocado a la entrada principal de su fábrica en Maracay (al norte del país), según ha confirmado a Efe un trabajador de la sede.

Todas sus obligaciones contractuales se han resuelto con los empleados, proveedores y clientes, ha informado la compañía, mientras que el acuerdo de licencia para el uso de sus marcas y personajes en Venezuela se ha cancelado.

El pasado mes de febrero, la compañía alimentaria ya advirtió que el deficiente acceso a materias primas y los escasos dólares para importar bienes debido a los controles cambiarios estaban perjudicando la capacidad para operar su filial venezolana.

De esta forma, Kellogg se une a otros gigantes del sector del gran consumo, como Kimberly Clark, General Mills, PepsiCo, Kraft Heinz o Parmalat, en reestructurar sus operaciones por sufrir diferentes incidencias en el mercado venezolano durante los últimos años.

Reacción de Maduro
Ante este anuncio, el presidente del Gobierno, Nicolás Maduro, ha confirmado que iniciará las acciones judiciales “para solicitar el código rojo (de Interpol, el mayor nivel de alerta) para los dueños, accionistas de la empresa Kellogg, para que paguen en los tribunales".

“Hoy en Maracay la empresa Kellogg, en manos de unos inversionistas mexicanos amaneció con las puertas cerradas y les depositaron en las cuentas las prestaciones sociales a los trabajadores, lo cual es completamente inconstitucional e ilegal”, ha lamentado el candidato a la reelección como líder del ejecutivo, que tendrá lugar el próximo domingo.

Maduro ha dado instrucciones “para que la empresa continúe produciendo sus productos para el pueblo de Venezuela sin ningún problema". Además, comentó que envió a varios ministros para "entregar" la empresa a los asalariados. En su opinión, Kellogg ha tomado esta decisión hoy por las elecciones del domingo “y creen que el pueblo se va a asustar”.