Inversión de Ferrero en ICFC

infoRETAIL.- Grupo Ferrero está impulsando la transformación de la planta Ice Cream Factory Comaker (ICFC) de Alzira (Valencia) con el objetivo de convertirla en su hub tecnológico europeo para el desarrollo de helados. Este movimiento estratégico posiciona a la Comunidad Valenciana como un territorio clave dentro de los planes de crecimiento de la compañía en esta categoría.

La planta ICFC está ya plenamente integrada en el ecosistema global del grupo y asumirá un papel fundamental en el desarrollo y expansión de la cartera de helados de Ferrero en toda Europa. Esta decisión forma parte de un plan a largo plazo diseñado para consolidar el crecimiento de la compañía en este segmento, aprovechando el potencial industrial y humano de la región.

Para lograrlo, Ferrero ha aprobado una inversión de 140 millones de euros como parte de un ciclo de modernización centrado en mejoras tecnológicas e industriales en la planta. Con esta inversión, el grupo ampliará la capacidad de la misma, modernizará los procesos e implantará nuevas tecnologías para mejorar la calidad, la eficiencia y la sostenibilidad de la producción.

La compañía dejará de fabricar MDD en esta fábrica a finales de 2026 y mantendrá la continuidad de los empleados

El plan de transformación incluye la instalación de nuevas líneas de producción antes de 2030 y el desarrollo de nuevos productos de marca propia. Todas estas innovaciones se fabricarán en Alzira y se distribuirán en toda Europa, reforzando el papel de la planta como motor de la expansión del negocio de helados de Ferrero.

Para hacer posible esta nueva fase y optimizar la capacidad de producción, la empresa dejará de fabricar definitivamente marcas de distribución (MDD) en Alzira a finales de 2026. Se mantendrá todo el suministro regular de productos y se respetarán los acuerdos existentes. La decisión de cesar las actividades de producción de MDD se aplica exclusivamente a la planta de Alzira, y el resto de los centros de producción de helados del Grupo Ferrero continuarán sus operaciones actuales sin ningún cambio.

Ferrero garantiza la continuidad laboral de todos los empleados a lo largo del proceso, tanto en funciones de oficina como de producción y algunos de ellos podrán asumir nuevas responsabilidades dentro de la estructura renovada. La compañía implementará programas de capacitación y brindará apoyo para facilitar la adaptación a estos nuevos roles.

"La elección de Alzira como sede de nuestro hub tecnológico europeo del helado es una clara muestra del valor estratégico de la Comunidad Valenciana en los planes de expansión continental del Grupo. Esta inversión no es sólo una apuesta por la innovación tecnológica, sino también un compromiso firme con la estabilidad y el desarrollo socioeconómico de la Ribera Alta. Con estos esfuerzos, transformaremos esta planta en un centro de excelencia que demostrará el liderazgo industrial y la calidad de España en toda Europa", indica el director de Comunicación y Relaciones Institucionales de ICFC, perteneciente al Grupo Ferrero, Franco Martino.