infoRETAIL.- El fabricante internacional de snacks Mondelez ha dado un paso más en sus planes de sostenibilidad al haber obtenido la certificación de la Mesa Redonda sobre el Aceite de Palma Sostenible (Roundtable for Sustainable Palm Oil, RSPO) del 100% del aceite de palma comprado en 2013. 

Esta certificación se produce dos años antes del compromiso que ya tenía la multinacional para satisfacer todos los requisitos sobre sostenibilidad de cara al año 2015, gracias a una combinación de aceite certificado por RSPO y certificados de Greenpalm que apoyan la producción sostenible.

“La certificación del 100% del aceite de palma por parte de RSPO representa un hecho importante en nuestro compromiso a largo plazo de adquirir únicamente aceite producido en tierras de propiedad legal, que no producen deforestación o pérdida de turberas, que respetan los derechos humanos y que no realizan trabajos forzados ni explotación infantil”, señala Dave Brown, vicepresidente de Materias Primas y Suministros Estratégicos Mundiales. 

“Reconocemos la necesidad de ir más allá, por lo que también hemos solicitado a nuestros proveedores de aceite de palma transparencia sobre los niveles de trazabilidad en sus cadenas de suministro. Conocer las fuentes de abastecimiento del aceite de palma es un primer paso esencial para facilitar las investigaciones y promover mejoras en las prácticas sobre el terreno”, ha añadido.

A lo largo de los primeros meses de este año, Mondelez International estudiará los resultados procedentes de los proveedores y, durante el segundo trimestre de 2014, publicará un plan de acción para dar prioridad a los suministros que cumplan con los principios sobre sostenibilidad de la compañía, eliminando aquellos que no los cumplan en 2020 como fecha límite. 

El trabajo de la compañía en aceite de palma forma parte de un compromiso más amplio con las fuentes sostenibles de las principales materias primas agrícolas, tal y como indican desde Mondelez International. 

La firma invierte 600 millones de dólares durante una década en los planes Cocoa Life y Coffee Made Happy, que ayudan a los agricultores a crear unas comunidades prósperas, y en el programa de suministro de trigo europeo Harmony, que promueve la biodiversidad y las buenas prácticas medioambientales.