Evento Asedas

infoRETAIL.- La Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas) ha presentado esta mañana en Madrid el dictamen del Comité Económico y Social Europeo (Cese), que aborda cuestiones muy relevantes para la recuperación de las redes de distribución comercial europeas y españolas, particularmente afectadas por la pandemia. 

El acto, celebrado en la Sede de la Unión Europea (Casa de América) y al que ha asistido infoRETAIL, ha contado con la participación de la responsable de Comunicación de Asedas, Nuria Cardoso; la consejera económica de Representación de la UE en España, Paz Guzmán; la responsable de Asuntos Europeos de CEOE y consejera de Comité Económico y Social Europeo (Cese), Patricia Círez; la directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), consejera del Cese y presidenta del Grupo de Estudio sobre Transformación Digital y Comercio Minorista, Ileana Izveniceanu; y el secretario general de Asedas, consejero del Cese y ponente del dictamen sobre digitalización, Felipe Medina.

En sus intervenciones, los ponentes han avanzado en las piedras angulares para el restablecimiento de la actividad regular de las empresas de distribución, si bien conforme a nuevos parámetros derivados de las nuevas demandas y necesidades de un consumidor que ha transformado sus prioridades y hábitos de compra de manera radical.

Felipe Medina: “La transición ecológica y la digital son los dos pilares en los que se apoya la recuperación del comercio”

Algunos de estas cuestiones son la integración del comercio físico y online (omnicanalidad, proximidad digital); la necesidad de crear reglas de juego homogéneas con otros países para competir en igualdad de condiciones; la protección de los consumidores, también si compran a través del canal digital; la sostenibilidad y la gestión de residuos y la demanda de una formación profesional sólida para responder a los retos del futuro. 

Todos estos aspectos se resumen en la demanda de un 'Pacto Europeo por el Comercio' que reconozca este sector como esencial en el marco de un ecosistema estratégico para la recuperación europea.

Fomentar la digitalización
En su ponencia, la primera del acto, la consejera económica de Representación de la UE en España, Paz Guzmán, ha ponderado el papel de las instituciones europeas para dar respuesta con eficacia y celeridad a las consecuencias de la crisis sanitaria. 

Así, junto a la creación de un programa especial de compras por parte del Banco Central Europeo y de un marco de ayudas temporales para que los estados miembros fomenten sus industrias y el empleo, Guzmán ha destacado la solidez del Plan de Recuperación y Resiliencia, que destinará a España, el país más afectado por la covid-19, más de 70.000 millones de euros que permitirán duplicar la inversión pública en los próximos tres años.

Paz Guzmán (UE) cifra en un 10% las compañías nacionales que operan en 'e-commerce' y marca como objetivo alcanzar el 25% en 2025

Dicha cantidad se destinará a propiciar la transición climática, por un lado, y a la mejora de las competencias digitales y la incorporación a las empresas de nuevas tecnologías, por otro. “El objetivo es digitalizar a más de un millón y medio de empresas e impulsar su actividad en el canal online”, ha declarado Guzmán, quien cifra en un 10% las compañías nacionales que operan en e-commerce y marca como objetivo alcanzar el 25% en 2025. 

Para triunfar en ese propósito de digitalización de las pymes se destinarán casi 5.000 millones de euros. “España ocupa actualmente el decimosexto puesto entre los miembros de la UE en digitalización y podemos mejorar eso”, ha añadido.

Por su parte, la responsable de Asuntos Europeos de CEOE y consejera de Cese, Patricia Círez, ha definido el carácter de la entidad en la UE como garante de la competitividad de las empresas españolas. En su opinión, el papel de las estas para la recuperación económica es incuestionable, pero ha insistido en la necesidad que estas logren la ansiada triple sostenibilidad (económica, social y medioambiental) sin menoscabo de su competitividad: “Para ello es necesario contar con un marco jurídico flexible y que posibilite la innovación”, ha sostenido.

El impacto que la digitalización ha tenido en los consumidores y los derechos de estos en el nuevo marco de la omnicanalidad establecido a raíz de la pandemia han sido los ejes de la intervención de la directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izveniceanu.

Cercano y esencial
Izveniceanu ha alabado también el papel de las empresas de distribución de alimentos durante la época más dura de la pandemia: “Salvo en el caso anecdótico de la levadura, no se registraron desabastecimientos en ninguna categoría”. Este comportamiento ejemplar permitió al comercio minorista dejar al descubierto como nunca antes sus componentes de esencialidad y cercanía en lo que, según sus propias palabras, “resultó la mejor campaña de comunicación para el canal”.

El Pacto Europeo por el Comercio aboga por el mantenimiento de la condición del comercio como sector esencial, fomenta la formación y establece un marco regulatorio

Frente al reto de la omnicanalidad, más imprescindible que nunca para los consumidores tras la pandemia, los retailers han de conseguir no quedarse atrás y ofrecer a sus clientes virtuales idéntica atención y derechos que a los que acuden a sus tiendas físicas: “Queda por hacer en materia de información y seguridad de los productos”, ha reconocido.

Finalmente, el secretario general de Asedas, Felipe Medina, ha considerado en su intervención la digitalización como pilar básico del Gran Pacto Verde europeo. “La transición ecológica y la digital son los dos pilares en los que se apoya la recuperación del comercio”, ha aseverado, precisando que la segunda “no es sólo e-commerce tan favorecido por la pandemia, sino que es también inteligencia artificial, big data, robótica, etc., aplicados a la imagen de las tiendas, a su logística, a sus plataformas de venta...”.

Asimismo, ha destacado la importancia del comercio en Europa, donde concentra más de 20.000 empleos (uno de cada siete) y comprende más de 35 millones de establecimientos con un papel preponderante en la actividad económica tanto en las pequeñas poblaciones rurales como en los grandes núcleos urbanos.

En este sentido, la creación del Pacto Europeo por el Comercio aboga por el mantenimiento de la condición del comercio como sector esencial en el futuro, fomenta la formación en competencias de sus trabajadores y establece un marco regulatorio que redunda en la competencia legal de las empresas que acometen su digitalización.