Dulces

infoRETAIL.- El sector del dulce comienza a acusar los efectos del coronavirus. La Asociación Española del Dulce (Produlce) ha hecho balance de los diez días de estado de alarma en España y su incidencia en el sector, haciendo hincapié en la caída de las ventas del canal impulso, uno de los formatos clave para esta industria.

"El canal impulso ha sufrido un descenso vertiginoso en sus ventas, y aquellas categorías y empresas que dentro del sector del dulce tienen una mayor dependencia del peso de las ventas en este canal (quioscos, tiendas de snacks, pequeños comercios de alimentación, estancos…) están pasando por un momento difícil", indica la entidad.

Esta situación se contrapone a la vivida por el canal de la gran distribución, donde casi todas las categorías de alimentación han experimentado un crecimiento "notable". En el impulso, la falta de pedidos durante estos últimos diez días está lastrando los resultados de estas empresas.

Olga Martínez, presidenta de Produlce: "Es clave que los consumidores recuperen pronto sus hábitos de consumo y sigan disfrutando con nuestros productos"

A pesar de la situación, todas ellas intentan mirar con optimismo a un futuro que, seguro, traerá nuevamente la normalidad a nuestra sociedad y confían en que tras este parón “los consumidores vuelvan a los quioscos y pequeñas tiendas a comprar chicles, caramelos y gominolas, como han hecho siempre, para volver a saborear con ‘nosotros’ sus momentos de ocio y relax".

"Es clave para nuestro sector -y para la propia supervivencia de estos pequeños comercios- que los consumidores recuperen pronto sus hábitos de consumo y sigan disfrutando con nuestros productos", explica la presidenta de la asociación, Olga Martínez.

Por otro lado, desde Produlce recuerdan que los productos de la industria española del dulce forman parte de otros de los `rituales’ hogareños, que están haciendo más sencillos estos duros días de confinamiento.

"Me refiero a esos obradores que improvisamos, en nuestras cocinas, para preparar bizcochos y tartas con los más pequeños de la casa. O esa deliciosa onza de chocolate que saborean algunos padres y madres -después de una jornada agotadora de teletrabajo y quehaceres domésticos-, cuando sus hijos ya duermen y los mayores pueden relajarse un poco”, comenta Olga Martínez.

“Nuestros productos nos aportan energía para comenzar el día y ese momento de placer que muchas veces necesitamos. No podemos dejar de reconocer y agradecer a todos los empleados del sector el esfuerzo, compromiso y responsabilidad que están demostrando”, remarca la directiva, quien reconoce que la alimentación “ha logrado garantizar el abastecimiento -y lo seguirá haciendo- durante todo el periodo de crisis del coronavirus”.