infoRETAIL.- Kantar Media ha elaborado un informe en el que identifica las diez tendencias principales de social media para 2018. El panorama para este año parece que estará marcado por la evolución y consolidación del entorno tecnológico y digital.
1. Las nuevas tecnologías ofrecen un gran número de oportunidades a las marcas: La revolución tecnológica está íntimamente ligada a las marcas mediante el contenido. La Realidad Aumentada (AR), la Realidad Virtual (VR) y El Internet de las Cosas (IoT) no son más que puentes que conectan lo real con lo virtual. El contenido será el nexo de unión entre los objetos, las personas y la tecnología; siempre que no surja de la experiencia (virtual) en sí misma.
Sin embargo, el contenido tendrá que afrontar nuevos retos dependiendo de los canales. El Internet de las Cosas necesitará traducirse en beneficios tangibles para los consumidores. La Realidad Aumentada, la Realidad Virtual y las tecnologías mixtas, se centrarán más en la experiencia que en cómo se puede aplicar la tecnología a sus productos. El desarrollo de los asistentes de voz inteligentes es otro de los grandes retos del marketing de contenidos.
2. El desarrollo de la Inteligencia Artificial: Los algoritmos de ensayo y error alimentan la actual revolución de la Inteligencia Artificial. Por ejemplo, el ‘Deep Learning’ permite reconocer a las redes artificiales neuronales los conceptos de alto nivel recurrentes en los datos al agrupar los conceptos de los niveles más bajos.
Mientras tanto, el Reinforcement Learning extiende la inteligencia de máquina en una dirección distinta, en concreto en máquinas de enseñanza, con el objetivo de que puedan desempeñar determinadas funciones.
3. Apostar en grande por la realidad alterada: La Realidad Aumentada (AR), la Realidad Virtual (VR) o incluso la realidad mixta (MR) son definitivamente cuestiones polémicas, pero constituyen nichos de mercado y necesitan una imagen más consolidada.
En estos momentos, aún quedan muchas cosas por lograr antes de que comience a funcionar la realidad virtual social. Y es que esto es algo más que colocar avatares
en un mismo espacio virtual, y aunque técnicamente aún queda mucho para llegar a esa fase, quizás alcancemos el punto crítico en 2018, y pueda desarrollarse en los próximos años.
4. Las redes sociales reajustan su programación de televisión: El formato vídeo es importante, ya que crea interacción, y esta conduce al engagement. Y si muchas de las conversaciones que han tenido lugar han sido sobre los vídeos online, hay que tener en cuenta que, con la importancia que tienen, no son el objetivo final. El panorama está más segmentado que fragmentado, y está ganando en madurez, lo cual conlleva algún tipo de consolidación.
5. La publicidad en redes sociales inspira nuevas experiencias publicitarias: La publicidad en redes sociales ha establecido recursos creativos para inspirar otros modelos y experiencias publicitarias. Estos anuncios se convierten en algo más personal, interactivo y valorado por el consumidor.
Todos estos elementos son claves en una era en la que los ad blockers o bloqueadores de publicidad son cada vez más populares entre los consumidores, que están hartos de que los anuncios les molesten continuamente. Al final, el marketing en redes sociales ya no es cuestión de construir relatos, sino experiencias. De generar valor tanto para las marcas como para los consumidores
6. Potencia la marca con el marketing de influencia: Los micro-influencers se han apropiado del marketing en las redes sociales, con un nuevo grado de compromiso.
Cada vez son más las marcas que logran resultados mediante el marketing de influencia, una alternativa que funciona. Pero antes de dar el paso, se debe saber qué enfoques de marketing de influencia están disponibles actualmente en el mercado: El enfoque “Relaciones Públicas”, Guest-blogging y Social Takeovers, Contenido patrocinado, Programas de afiliación y cupones de descuento, Pruebas de producto, Concursos y sorteos, Eventos, Co-creación, Embajadores de marca, Impulsar el poder del marketing de influencia.
7. El formato en vídeo está en lo más alto: Si las marcas necesitan familiarizarse con el formato en vídeo, aún existen formatos interactivos que generan engagement, por lo que estas deberían pensar en lograr la combinación correcta para que sus comunicaciones alcancen su objetivo. Diversifica tus formatos, prueba, y utiliza elementos interactivos que puedan aportar algo de vida a tu storytelling.
8. La generación Z lucha por la privacidad: Muchos de los que forman parte de esta generación utilizan alias para evitar ser localizados en las búsquedas online, e incluso crean dos tipos de cuentas de Instagram: rinsta (reales) o finsta (falsas o solo para los amigos). Además, estos adolescentes utilizan apps como Vaulty, que permite a sus usuarios ocultar fotos y vídeos.
Estos jóvenes también tienen a su disposición redes sociales “de incógnito”, como Sarahah, Anonyfish y Minds.com, que permiten a sus usuarios comentar de forma anónima. Si aún queda alguna duda de su deseo de privacidad, se debería tener en cuenta lo siguiente: Sarahah alcanzó el primer puesto en la Apple App Store en 30 países, ¡tan solo dos meses después de su lanzamiento!
9. Noticias falsas, el lado más oscuro de las redes sociales: Debido al fenómeno de las ‘fake news’, las redes sociales contratarán empresas que controlarán la calidad de los medios. Las redes sociales más populares tendrán que ser responsables de la falta de transparencia en cuanto a cómo comparten los datos con los profesionales del marketing y para “evaluar su propio trabajo” cuando presenten los resultados de sus campañas.
10. La convergencia de las redes sociales une a China como imperio: La convergencia entre redes sociales y experiencia de usuario ha alcanzado un nivel de “sofisticación” sin precedentes con las redes sociales chinas.
Con más de 800 millones de usuarios mensuales activos, WeChat es uno de los muchos ejemplos de la penetración del Internet móvil en China. Este es el motivo por el que muchas marcas y empresas de retail se conectan con sus consumidores directamente en las aplicaciones de redes sociales y se saltan las aplicaciones móviles directas al consumidor.