infoRETAIL.- La industria de alimentación y bebidas ha incrementado sus niveles de empleo un 3,7% durante el primer semestre de 2022 según el Informe de Empleo realizado por la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), en colaboración con Ceprede y con el apoyo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
Los datos revelan que, en los seis primeros meses del año, el sector concentra un promedio de 518.400 ocupados, de los que 465.200 pertenecen al segmento alimentación (89,7%) y 53.200 a bebidas (10,3%). Alimentos y bebidas representan el 21% del empleo de la industria manufacturera, configurándose como el sector industrial más grande en términos de empleo, “lo cual demuestra que este es un sector resiliente y estratégico para el desarrollo económico y social de todo el país”, ha asegurado el presidente y director general de FIAB, Mauricio García de Quevedo.
Por comunidades autónomas, Cataluña (20,3%), Andalucía (14,1%) y Comunidad Valenciana (10,6%) encabezan el listado, seguido de Castilla y león (9%), Galicia (8,2%) y Castilla-La Mancha (7,2%).
El sector concentra 518.400 empleos, de los que 465.200 pertenecen al segmento alimentación (89,7%) y 53.200, al de bebidas (10,3%)
En relación al empleo femenino, la cifra total de ocupadas en el sector en el primer semestre de 2022 se ha incrementado un 1,3% con respecto al mismo periodo de 2021, aunque el avance más significativo lo protagoniza los hombres.
La representatividad del empleo femenino desciende un 0,9% y supone el 38,5% del total de ocupados, pese a que la representación de la mujer en los sectores de alimentación y bebidas es más elevada que en el conjunto de la industria manufacturera, con una cuota solo del 27,7% de los ocupados.
Por edades, el Informe señala el empleo juvenil como el mayor crecimiento ha registrado. Este tramo de 16 a 25 años anota en la comparativa interanual una mejora del 49,5%. Esta realidad convive al mismo tiempo con el progreso del empleo de 56 o más años, que también ha aumentado un 12,4%. Aun así, el tramo más representativo continúa siendo entre 46 y 55 años, con una cuota del 28,5% del total de ocupados.
Por otro lado, los puestos indefinidos siguen dominando la modalidad de contratación en la industria, habiendo mejorado este tipo de contrato mejoró en un 5,2% y siendo 383.576 (cerca del 80% de los empleados) los acogidos a él.
Aunque avanza ligeramente la contratación a jornada parcial, dentro del sector sigue siendo predominante la jornada completa, en la que más de un tercio del empleo se corresponde con el perfil de artesanos y cualificados. Sin embargo, la industria acusa cada vez más la dificultad de muchas empresas para cubrir ciertos puestos, algo que FIAB insta a combatir mediante el refuerzo de la oferta educativa con una formación adaptada a las competencias y necesidades específicas de estas industrias.
Desde FIAB piden acelerar la aprobación del Perte alimentario y bajar temporalmente el IVA de alimentos y bebidas para anticiparse al impacto de la coyuntura sobre el empleo en el sector
A pesar de que el sector ha sabido mantener el equilibrio en el primer semestre de 2022, desde FIAB se advierte de la vulnerabilidad de la actividad industrial a causa del contexto actual, con un consumo ralentizado por la inflación, los altos costes energéticos, las tensiones logísticas, los problemas de suministros y el encarecimiento de las materias primas, que ya afectan a la productividad industrial y podrían hacerlo al empleo.
“No estamos todavía en este escenario, pero vemos con preocupación la deriva que pueda tomar la situación tan compleja y queremos evitar la adopción de cualquier medida legislativa o fiscal que pueda perjudicar la competitividad y el empleo de las industrias”, ha señalado García de Quevedo.
En esta línea, la federación ha solicitado al Gobierno no introducir más costes a las empresas, sino ofrecerles seguridad jurídica para que puedan seguir aportando al crecimiento económico y laboral.
Entre otras medidas, FIAB ha destacado la adopción de una bajada temporal del IVA a los alimentos y bebidas que palíe el retroceso del consumo, ayudas directas para las pymes y acelerar la aprobación del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) para el sector alimentario.