infoRETAIL.- El gran consumo, de momento, resiste a la tormenta perfecta en la que confluyen, al menos, cuatro crisis de gran calado: la inflación, la guerra en Ucrania, la pandemia y la emergencia climática. Esta situación está impactando en los hábitos de compra del consumidor español, que vive entre el bombardeo de malas noticias y el deseo de disfrutar y recuperar el tiempo perdido durante los momentos más duros del covid-19.
“El 39% de los españoles está haciendo recortes en los gastos generales, mientras que el 32% está dejando de hacer ciertas cosas y en ese mismo porcentaje está cambiando algunos comportamientos y elecciones”, ha explicado Martin Wohlfart, director del estudio en España ‘Global Issues Barometer’, en un encuentro online con los medios, al que ha asistido infoRETAIL.
En este momento cuando parece que empieza a aflorar el ahorro cosechado por las familias españolas durante la pandemia. “Ahora estamos empezando a tirar de esos ahorros, tal y como asegura el 17% de los encuestados”, apunta Martin, que añade que un 26% de los consumidores ha reducido la cantidad de dinero destinada a la hucha.
Sin embargo, la compra de alimentación parece ajena a este contexto. De hecho, el estudio revela que es este sector al que menos afecta el ahorro. Solo el 23% de los españoles ahorrará en las compras en supermercados e hipermercados, un dato alejado de los artículos de lujo (60%), el entretenimiento (40%) o las vacaciones (38%). Así, el 85% de los hogares asegura que está pudiendo hacer frente a las compras de básicos, como la alimentación, sin problemas.
Y es que dos de cada tres españoles sienten que su situación económica es buena, un dato que contrasta con la opinión que los ciudadanos tienen sobre las finanzas del país: un 72% considera que las perspectivas económicas de país son bastante sombrías. “Esta contradicción responde a una cuestión de psicología del comportamiento: Lo nuestro siempre es mejor”, comenta Wohlfart.
El informe destaca también que los españoles no ven ahora más allá del corto plazo. Sin embargo, con el paso de los meses irán cambiando hábitos de consumo, más ajustados al momento actual. “El día a día vence al largo y medio plazo. Nos movemos entre querer aprovechar el tiempo perdido durante la pandemia y el muro de contención de la inflación, buscamos ese equilibrio”, indica el responsable del estudio en España.
En esta línea, un 68% de consumidores afirma que, en efecto, los precios están subiendo de manera muy aguda, una hipersensibilidad mayor que en otras economías europeas como Alemania, donde un 59% tiene ese mismo pálpito con el aumento del coste de la vida; o bien Francia y Reino Unido, con el 49% y el 48%, respectivamente. “España es el tercer país del mundo en percepción de inflación”, tras Argentina y Turquía.
Sobre el impacto concreto de la inflación en la compra en gran consumo, Martin Wohlfart asegura que la marca propia está “calando hondo”, tal y como sucedió en la pasada crisis económica. No obstante, advierte: “Solo bajando precios como marca, la recuperación no será igual. La solución no es bajar los precios”.
Segundo país más sensible a la guerra
Por otro lado, el informe revela que un 87% de españoles se muestra preocupado por la Guerra de Ucrania, lo que sitúa a España como el país con mayor preocupación, solo superado por Polonia (96%), que está puerta con puerta con su vecino ucraniano.
Más allá de la guerra, los españoles muestran muy diversas preocupaciones, siendo las más citadas la economía y la educación (un 49% cada uno) y la salud (45%), por encima incluso de la pandemia, que, de momento, preocupa a un 38%, siendo España como es uno de los países con mayor tasa de vacunación entre la población.
No obstante, cuando se trata de problemas a resolver, los españoles piden más acción y resolución ante cuestiones sociales (30%), seguido de la economía (23%) y el clima y medio ambiente (20%). Por tanto, los españoles muestran ciertas diferencias entre lo que les preocupa y lo que urge subsanar.
El paradigma de esta tendencia es la propia guerra. Si bien preocupa mucho a casi nueve de cada diez españoles, solo un 14% pide hacer algo a los Gobiernos y organismos globales. Y lo mismo sucede con la pandemia, pues preocupa al 38%, pero solo un 7% demanda que la sociedad y sus responsables pongan solución.
Respecto a la sostenibilidad, el 63% de los españoles asegura que desea comprar productos más respetuosos con el medio ambiente, pero las marcas tienen que asegurarse de que el consumidor puede permitírselo. De hecho, el 45% de los usuarios busca activamente empresas y marcas que ofrecen formas de compensar su impacto en el medio ambiente.