Medidas Covid

infoRETAIL.- Las organizaciones que integran la cadena de valor de la alimentación y el gran consumo (Aces, Aecoc, Anged, Asedas, Cooperativas Agroalimentarias, Fiab, Hostelería de España y Marcas de Restauración) han trasladado a los ministerios de Sanidad, Trabajo, Comercio, Industria y Turismo, Agricultura y Seguridad Social una serie de peticiones llamadas a evitar contingencias en el sistema productivo derivadas de la actual incidencia de contagios producida por la sexta ola de covid-19, la más alta de toda la pandemia.

Las peticiones de las empresas, centradas en propiciar un mejor funcionamiento de los centros de trabajo, se resumen en una doble vertiente: por un lado, solicitan que se facilite el alta laboral automática de todas las bajas por covid después de los siete días que establece el período de cuarentena (u otros que las autoridades puedan indicar), sin necesidad de acudir a los centros de atención primaria, siempre, lógicamente, que no existan síntomas. 

Como en el caso de la vacunación de los trabajadores, las empresas ponen a disposición del sistema público de salud sus mutuas de accidentes de trabajo para colaborar en esta tarea en condiciones de plenas garantías sanitarias y jurídicas, contribuyendo así a evitar consultas y aglomeraciones innecesarias en atención primaria.

El comercio alimentario supera en este momento las 20.000 bajas laborales, cifra que aumenta a diario y que dificulta gravemente la adecuada gestión de las empresas

Por otro lado, las compañías demandan la reducción, siempre desde un criterio sanitario, de los períodos de cuarentena a los mínimos indispensables para garantizar la correcta gestión de la pandemia, al estilo de lo establecido para el ámbito escolar, dado que la actual reducción de diez a siete días resulta insuficiente para garantizar la cobertura de las vacantes.

El incremento de las bajas de trabajadores registradas en las empresas del sector supone un gran problema administrativo ante las dificultades que estos encuentran para obtener el alta debido a la saturación de la atención primaria. Uno de cada siete de los trabajadores que se encuentra de baja podría reincorporarse de inmediato, pero no lo hace al carecer de la autorización médica. Además, la posibilidad de obtener bajas telefónicas en algunas Comunidades Autónomas en base a auto-test de antígenos está suponiendo un problema añadido de gestión de las altas, que sí deben obtenerse de manera presencial en los centros de salud.

Sólo el comercio alimentario supera en este momento las 20.000 bajas laborales, una cifra que aumenta a diario y que complica enormemente la gestión de las empresas.  

Desde el inicio de la crisis, la cadena de valor de la alimentación y el gran consumo ha dado un ejemplo de servicio a los ciudadanos y ha garantizado el abastecimiento incluso en los momentos más duros. A ello contribuyó decisivamente la consideración del sector como esencial en los primeros estados de alarma. 

Las circunstancias actuales complican aún más el funcionamiento de los establecimientos, especialmente en aquellos abiertos al público y en las plataformas logísticas, cuyos trabajadores no pueden teletrabajar ni ser sustituidos por otros medios.