Etiqueta Enviroscope

infoRETAIL.- El centro tecnológico AZTI y la Universidad de Lovaina (Bélgica) han desarrollado Enviroscope, un sistema de etiquetado ambiental que permite reconocer fácilmente el grado de sostenibilidad ambiental de los alimentos y bebidas en el punto de venta según la metodología europea internacionalmente aceptada y estandarizada de huella ambiental de producto.

Enviroscope es útil tanto para la industria agroalimentaria como para los consumidores. A la primera le permite medir y comunicar el impacto ambiental de sus productos de una forma sencilla, integrando varias categorías de impacto ambiental en una sola y promoviendo el ecodiseño del producto a lo largo de toda la cadena de suministro. A los consumidores, por su parte, les aporta información muy útil para establecer comparaciones entre productos y categorías, fomentando pautas de consumo sostenibles

“Enviroscope es un algoritmo que agrega en una única puntuación final los 16 impactos ambientales generados a lo largo de todas las etapas de producción y consumo de un kilogramo de producto”, explica una de las creadoras de la metodología e investigadora del área de Procesos Eficientes y Sostenibles de AZTI, Saioa Ramos. 

En virtud de ese análisis se otorga al producto una letra (A | B | C | D | E) en una escala que valora su sostenibilidad en aspectos relacionados con la forma de producción, procesado, envasado, distribución, consumo y gestión de los residuos derivados de ese producto. Su emplearlo con 150 productos de alimentación y bebidas permite concluir que la etiqueta es capaz tanto de captar la variabilidad de impacto entre ellos como de discriminar, dentro de la misma tipología, aquellos con ‘peores’ técnicas.

Desarrollado por un grupo de científicos independientes el nuevo sistema de etiquetado da respuesta a la preocupación cada vez mayor de empresas y consumidores por producir y consumir alimentos de forma más sostenible y responsable. 

La iniciativa cuenta con el apoyo de múltiples empresas, así como del Gobierno Vasco y de la propia Unión Europea a través de la iniciativa de innovación alimentaria europea EIT Food, que trabaja para hacer que el sistema alimentario sea más sostenible, saludable y de confianza.