infoRETAIL.- Galletas Gullón ha renovado sus certificaciones IFS y BRC con la máxima puntuación en las auditorías, dos sellos de calidad que garantizan los máximos niveles de seguridad alimentaria de los procesos de producción.

Desde Galletas Gullón explican que “estas certificaciones son indispensables para continuar desarrollando las exportaciones, que durante el año pasado alcanzaron el 35% del total de la facturación. En concreto, la certificación BRC es fundamental para la exportación en el mercado anglosajón, mientras que la certificación IFS es necesaria para el francés y alemán”.

Juan Miguel Martínez Gabaldón, director general de Galletas Gullón, ha afirmado que “conseguir estas calificaciones supone todo un éxito, que corrobora que las fábricas de nuestra compañía se encuentran entre los centros productivos con mayores niveles de seguridad alimentaria de Europa”.

El directivo añadió que “ambos certificados aportan una gran seguridad a los distribuidores internacionales a la hora de elegir nuestro productos como marca de referencia”.

Por otra parte, Gullón también ha superado recientemente la auditoria de Aenor para la renovación de las normas ISO 9001:2008 e ISO 14001:2004, certificaciones que acreditan el correcto funcionamiento de los sistemas de gestión de calidad y ambiental.