infoRETAIL.- Nestlé y el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona han desarrollado Nutriplato, un método de educación nutricional, que ayudará a las familias a saber qué deben comer los niños y en qué cantidades.

Este método, que nace tras año y medio de trabajo de un equipo multidisciplinar formado por 20 expertos del Hospital Sant Joan de Déu y de Nestlé, está inspirado en el Healthy Eating Plate de la Harvard School of Public Health. A diferencia del proyecto estadounidense, el Método Nutriplato se ha creado como un método integral basado en la dieta mediterránea y especialmente para los niños.

De este modo, consta de un plato didáctico de tamaño real que marca las proporciones de los grupos de alimentos que deberían estar presentes en las dos comidas principales del día, la comida y la cena. Esta herramienta va acompañada de una guía que muestra cómo usar el plato y cómo seguir el método de forma óptima.

Los dietistas-nutricionistas que han desarrollado el plan gratuito Nutriplato han incluido, entre otros contenidos, consejos sobre el tamaño óptimo de las raciones según la edad del niño y un recetario con menús equilibrados adaptados para cada etapa, de cuatro a seis años y de siete a doce años.

Con este plan, que cuenta con una inversión inicial de 500.000 euros, Nestlé y el Hospital Sant Joan de Déu tiene la voluntad de llegar a 40.000 niños en una primera fase y a 10.000 profesionales de nutrición infantil.

Seguimiento
Por otro lado, la unidad de nutrición clínica y dietética del Hospital Sant Joan de Déu está llevando a cabo un programa de intervención nutricional a un millar de niños con sobrepeso u otras patologías asociadas que deben mejorar sus hábitos alimentarios.

Durante dos años, este hospital pediátrico de referencia pasará consulta dos veces por semana para evaluar si, aplicando el Método Nutriplato, los niños recuperan los hábitos de la dieta mediterránea o si, aquellos que lo necesitan, mejoran su índice de masa corporal.

El equipo de profesionales espera disponer de los primeros resultados al finalizar el primer año de seguimiento. En una segunda fase, el reto es hacerlo extensivo a otros ámbitos como, por ejemplo, los centros de atención primaria.