Almacén de mercancías

infoRETAIL.- El auge del comercio electrónico está disparando la contratación de espacios logísticos. El profesor de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC, Xavier Budet, asegura que "la celeridad es un factor clave en las actuales cadenas de suministro", y que es precisamente por este motivo que "los operadores logísticos se van situando más cerca de sus clientes".

Sin embargo, la Asociación de Promotores de Cataluña (APCE) y la consultora inmobiliaria Forcadell alertan de la poca disponibilidad de naves industriales en los lugares donde la demanda es más elevada, como Barcelona y Madrid.

"Si el crecimiento de las compras en línea sigue el ritmo de los últimos años, llegaremos a un punto en que no habrá suficiente espacio urbano y se producirá un colapso de los pedidos", asegura el profesor de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC, Josep Maria Català.

UOC: "Si el crecimiento del e-commerce sigue el ritmo de los últimos años, no habrá suficiente espacio urbano y se producirá un colapso de los pedidos"

Según un informe de Zetes, hoy en día las empresas líderes del mercado solo tardan 20 minutos en preparar un encargo y garantizan una entrega completa en el primer intento. Ahora bien, una saturación de las entregas —ligada a un aumento de los tiempos de entrega— pondría las compañías entre la espada y la pared, teniendo en cuenta que el 78% de los consumidores deja de comprar en una empresa si recibe un producto tarde o incompleto por tercera vez.

Català asegura que el uso de los macrodatos podría ser una solución a la falta de espacio logístico, ya que "permitiría la especialización de los almacenes según el barrio donde estén y factores como la renta per cápita, el volumen comprado, el tiempo de reposición o los productos más demandados por zona, horas y tipo de comprador".

Analizar los datos de los pedidos permitiría también ganar más espacio para las mercancías. "Podrían ofrecerse descuentos en los productos con menos rotación o bien podrían trasladarse a las naves de fuera de la ciudad para priorizar el almacenamiento de los productos más vendidos", ejemplifica Català.

Impacto medioambiental del reparto
Uno de los grandes retos de las entregas de compras electrónicas es el impacto medioambiental, ya que las principales ciudades europeas empiezan a restringir la entrada de vehículos contaminantes. "Habrá que buscar alternativas más respetuosas con el medio ambiente, como por ejemplo los vehículos eléctricos u otros medios de transporte como el patinete o la bicicleta", comenta Budet.

"Cada vez veremos más colaboraciones entre distintas empresas para consolidar y compartir infraestructuras y vehículos para formalizar las entregas", prosigue Budet.

Muchas compañías empezarán a utilizar los dark stores —locales en centros urbanos no abiertos al público para preparar y expedir los pedidos—, los centros temporales (pop-up) o las entregas colaborativas, en las que serán los particulares quienes terminarán entregando el producto al cliente.

Sin embargo, los profesores alertan de que las restricciones de los centros urbanos y la congestión del tráfico aumentarán los puntos de recogida. "Las taquillas de recogida permiten entregar más paquetes en menor tiempo, por lo que la rotación del producto aumenta y hay más espacio disponible en los almacenes", explica Català.