infoRETAIL.- La patronal de gran consumo Aecoc ha celebrado en Barcelona su asamblea general de asociados, una cita que ha contado con la intervención de su presidente, Ignacio González (en la imagen), quien ha analizado el actual contexto económico y sus perspectivas, así como su impacto en el plan estratégico de la asociación y de sus empresas.
González ha destacado que, hasta hace un par de meses, “nuestro país no sólo evolucionaba mejor que su entorno, sino que incluso, en marzo, los principales organismos habían revisado al alza nuestras expectativas de crecimiento, impulsados por una combinación favorable de competitividad, inflación a la baja, tipos de interés estables y un mercado laboral en evolución positiva”.
Además, los últimos trimestres de 2024 mostraron una dinámica especialmente positiva, con un dato relevante: por primera vez, el consumo superó al crecimiento del PIB, con un 3,6% frente al 3,3%. Esta tendencia, según González, “se ha mantenido en los primeros meses de 2025, aunque con menor fuerza, (3,5% frente al 2,8%), antes del anuncio de los aranceles de la administración Trump”.
Según González, España sigue sufriendo dos males endémicos: la baja productividad y el absentismo
Asimismo, el directivo ha destacado que el consumo de los hogares y la inversión están tomando el relevo al gasto público y al sector exterior como motores del crecimiento. Por otro lado, la inflación continúa en descenso, y el IPC adelantado de abril ha bajado hasta el 2,2%, impulsado principalmente por la bajada de los precios de la energía.
En cuanto al empleo, ha reconocido que, tras repuntar el primer trimestre del año, se ha sabido que los datos de abril han sido los mejores de los últimos 17 años en este mes, especialmente por el tirón del sector servicios, "si bien nuestro país sigue sufriendo dos males endémicos como son la baja productividad y el absentismo".
No obstante, el presidente de Aecoc ha alertado de que el entorno geopolítico ha cambiado drásticamente en un par de meses y ha puesto el foco en los efectos de las políticas proteccionistas de Estados Unidos advirtiendo que “el impacto de la guerra comercial ya se empieza a notar en nuestra economía”.
Así, Funcas ha revisado a la baja el crecimiento previsto para el PIB español, con una previsión del 2,3% en 2025 y del 1,6% en 2026. Pese a esto, Ignacio González ha precisado que, en este escenario global, “España sale mejor parada que otras naciones por su carácter de país de servicios y su menor dependencia directa del mercado estadounidense”, aunque, en su opinión, no hay que desestimar el impacto indirecto que, la desaceleración de economías como la alemana o la francesa pueden tener sobre sectores como el turismo y la hostelería.
También resulta especialmente relevante, en su opinión, el deterioro de la confianza del consumidor y de las empresas porque eso condiciona el consumo y la inversión.
Peticiones ante el nuevo escenario
Ante esta situación, el presidente de Aecoc ha pedido a la Unión Europea “evitar cualquier escalada en la guerra comercial y aprovechar la oportunidad para avanzar en la construcción de un verdadero mercado único”. Asimismo, ha solicitado al gobierno español protección y apoyo a los sectores más afectados por las guerras comerciales, colaboración público-privada para la búsqueda y desarrollo de nuevos socios comerciales y reconsiderar las medidas de mayor impacto en la pérdida de competitividad de las empresas españolas (evitar regulación medioambiental que suponga una pérdida de competitividad, regulación laboral e impulsar una política educativa más orientada al empleo).
En línea con esto, la exministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación del Gobierno de España, Arancha González Laya -invitada especial a la asamblea-, ha destacado que “una de las principales reivindicaciones tanto al gobierno de nuestro país como a las instancias comunitarias es profundizar el mercado único europeo”.
En su opinión, “necesitamos una Unión Europea más profunda, más seria, más comprometida y más abierta al mundo porque hoy en día estamos navegando solos entre olas geopolíticas. Pero, a diferencia de otros países, la Unión Europea tiene opciones y necesita confianza e inteligencia para desplegarlas”.
Arancha González Laya: “Estamos en un escenario en el que necesitamos mayores dosis de europeísmo y en el que necesitamos escuchar más al sector empresarial"
Con ese fin, recalca que Europa debe, poner en valor nuestro mercado único; poner en marcha las recomendaciones de los informes Letta y Draghi, eliminando aquella carga burocrática que resta competitividad al tejido empresarial; construir una unidad de la energía en Europa o de los mercados tecnológicos o de la defensa; avanzar en acuerdos comerciales como los de Mercosur, sin olvidar mirar a otros países (India, Tailandia, Filipinas…); y establecer una relación funcional con China.
Pese a todo, según Arancha González Laya, el ganador de esta batalla comercial iniciada por la Administración Trump es la globalización, sobre todo la de los bonos del tesoro a diez años, uno de los instrumentos financieros más globalizados en el comercio internacional. Esto ha obligado a Trump a replegar velas.
En este contexto de incertidumbre, la táctica europea de no ir a la guerra frontal ha sido inteligente, aunque llegamos a un momento difícil, en la que España debe dar fuerza al negociador comunitario y también poder ayudar a la Unión Europea para tener licencia para abrir acuerdos con otros mercados. “Estamos en un escenario en el que necesitamos mayores dosis de europeísmo y en el que necesitamos escuchar más al sector empresarial. Las empresas tenéis que ser más audibles en España y en la Unión Europea”, ha indicado.