infoRETAIL.- “El principal papel del CEO es rodearse de personas que sólo ven oportunidades”, ha afirmado Ignacio Sánchez Villares, director general de Leroy Merlin, durante ‘Retail Forum 2016’, organizado por iiR España, en el que se han analizado las estrategias a implementar y las características que debe reunir un alto directivo para diferenciar y posicionar a su empresa en un entorno altamente competitivo.

En este ‘think tank’ también han participado César de Vicente, CEO de Kiabi; Igor Unzalu, Customer Development Vice President de Unilever, y Javier Pelayo, International Business Vice President de Marco Aldany, quienes han sido moderados por Francisco Javier Rubio, CEO de Comerzzia.

Según Rubio, “el sector está evolucionando y progresando rapidísimamente en todo aquello relacionado con la omnicanalidad y el Internet de las Cosas. Hoy en día, un punto de venta es aquel lugar, ya sea físico u online, donde el cliente es atendido y reconocido. Y ante ello, todos tenemos que adaptarnos”.

Aprendizaje y velocidad
“El siglo XXI es el siglo del aprendizaje. Y los CEOs tenemos que aprender, debiendo obtener nuestros conocimientos de todos los sectores. Además, el siglo XXI es también el siglo de la velocidad; el competidor no es la tienda de enfrente, sino todo aquel que está en internet”, recalca Sánchez Villares, quien proclama que “el retail del siglo XX ha muerto y todos tenemos que crear nuestras propias disrupciones”.

El director general de Leroy Merlin prosigue: “El principal papel del CEO es rodearse de personas que sólo ven oportunidades. Lo único que no se puede decir en Leroy Merlin es ‘esto no se puede hacer’. Asimismo, hemos de ser conscientes de que el mejor valor añadido que puede aportar un CEO es su ejemplaridad, conociendo el negocio, los productos y las personas”.

Finalmente, Ignacio Sánchez ha enumerado los cuatro tipos de empleados que, a su juicio, se hallan en una empresa: quemados, contentos, motivados y comprometidos. “Los últimos son los que realmente cambian las compañías”, asevera el directivo.

La metáfora del jardinero
Por su parte, César de Vicente ha subrayado la importancia que tienen los equipos: “Mi proyección de negocio para 2020 ha pasado de una visión comercial a algo emocional, ya que ningún programa de ventas tiene validez frente a equipos felices. Y tener equipos felices implica tener clientes felices”.

Tras destacar lo necesario que es impulsar el talento de todas las personas que hay en la compañía y potenciar las cualidades humanas en un trato ‘human to human’, el CEO de Kiabi ha destacado la evolución que ha experimentado el CEO durante los últimos años: “Hemos pasado de ser un pescador, que esperaba las oportunidades, a un cazador, que las busca, pero ahora, además, debemos ser un jardinero, una persona preocupada por conseguir que el ecosistema tenga la luz y todas aquellas condiciones necesarias para favorecer la vida de las personas”.

Todo ello, a juicio de César de Vicente, está suponiendo una “radical revolución” en Kiabi, que se ha transformado y “ha pasado de ser un supermercado de ropa a convertirse en una marca de moda”.

Responder a los retos
Por su parte, para Igor Unzalu es necesario potenciar conceptos como acción, agilidad y flexibilidad, siendo necesario asumir nuevos retos. “En gran consumo, el futuro es muy incierto y existen muchos retos, pero la clave, más que pensar qué va a ocurrir, es responder al mundo incierto, a los retos existentes que surgen. Hay que prepararse para lo desconocido”.

Por ello, según el directivo, “el reto para Unilever es trabajar de manera diferente, en un ecosistema abierto, de alianzas. Hay que ser ágil y flexible, respondiendo al consumidor localmente”.

Finalmente, para Javier Pelayo “la misión del CEO consiste, fundamentalmente, en aprender, asegurarse que su equipo aprenda y en no tener miedo al cambio, porque la economía y los modelos comerciales no son iguales ahora que hace una década”.