infoRETAIL.- El grupo asiático de comercio electrónico Alibaba ha puesto en marcha un establecimiento físico en la ciudad portuaria de Tianjin (China), al sureste de Pekín.

Esta tienda ‘brick and mortar’ forma parte de un gran outlet de 20.000 metros cuadrados situado en la zona franca de la localidad. De este modo, la compañía pretende satisfacer la demanda de productos importados entre los consumidores locales, que van desde bocadillos hasta cosméticos.

Con el objetivo de atraer compradores, la compañía ha fletado dos trenes diarios para transportar clientes desde Pekín hasta las instalaciones en la zona franca. Durante el trayecto ferroviario, los consumidores pueden ver el catálogo de productos de la tienda, así como realizar pedidos.

Según informa la agencia Xinhua, Alibaba y su gran competidor JD.com han lanzado mercados en línea en los últimos dos años, en los que han vendido sólo productos importados a compradores online chinos que valoran más la calidad que el precio.

Los ciudadanos chinos son habituales de las grandes compras en el extranjero cuando hacen turismo. Las autoridades del país están buscando nuevos métodos para atraer esos gastos al mercado doméstico para ayudar a las empresas nacionales.