Presentación del informe económico de FIAB

infoRETAIL.- La industria de alimentación y bebidas ha alertado de la incertidumbre que rodea actualmente el sector, así como de las primeras señales de ralentización en el mercado. Unos síntomas que se aprecian especialmente en lo referido al contexto nacional, previo a las diferentes elecciones que se avecinan, así como a nivel internacional, fruto del estancamiento en las relaciones comerciales, el Brexit y la caída de la demanda interna de países de destino de las exportaciones españolas.

“Se empiezan a vislumbrar síntomas de ralentización y cierta debilidad en el contexto económico global que pueden verse reflejados en las cifras de producción y exportaciones”, ha advertido esta mañana el director general de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), Mauricio García de Quevedo, durante la presentación del Informe Económico Anual correspondiente a 2018.

El directivo ha alertado de que España podría sufrir una ralentización en el consumo interno y que lo que ahora existe es incertidumbre. “Habrá que ver qué medidas se ponen en marcha después de las elecciones”, ha manifestado.

Cerca de 1.000 empresas españolas de alimentación y bebidas han abandonado la aventura exportadora en los últimos doce meses

En su opinión, “hay motivos para ser precavidos”, teniendo en cuenta que los tratados de libre comercio “no se están acabando”, la incertidumbre existente para acceder al mercado estadounidense, el Brexit... “Es fundamental que Europa recupere cierta actividad económica porque se aprecia una ralentización importante”, añade.

El secretario general de Agricultura y Alimentación del MAPA, Fernando Miranda, ha reconocido que la situación internacional actual es “pesada” y que el comercio internacional atraviesa una “fase difícil”. No obstante, ha puesto en valor el papel que está jugando la Unión Europea, con intentos de abrir oportunidades, frente al “papel disruptor” de Estados Unidos y la “falta de claridad” en el Brexit.

Sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea, García de Quevedo ha recordado que España exporta a Reino Unido por valor de unos 8.000 millones de euros. En este sentido, Fernando Miranda ha calificado la situación de “incertidumbre máxima”, ya que se desconoce la relación comercial que mantendrá el país con Reino Unido: “No lo sabemos porque Reino Unido no nos dice qué es lo que quiere”.

El secretario general ha explicado que, en el peor escenario posible, Reino Unido pasará a ser como un tercer estado para las exportaciones. “Es momento para que los operadores estén informados, ya que hay mucha transmisión de información”, ha comentado Miranda, al tiempo que ha conminado a Administraciones y operadores a que tengan planes de contingencia.

Caída de las exportaciones
Con este contexto de fondo, las exportaciones de la industria alimentaria han descendido un 0,6%, pasando de 30.652 millones de euros en 2017 a 30.470 millones en 2018, poniendo fin a ocho años de crecimientos. García de Quevedo atribuye este descenso a la incertidumbre internacional y la debilidad de la demanda interna de algunos países de destino, como Francia, Italia, Países Bajos, Bélgica o Portugal.

Además, el director general de FIAB ha lamentado que cerca de un millar de empresas españolas hayan abandonado la aventura exportadora en el último año. “Se trata, sobre todo, de pequeñas y medianas compañías”, ha matizado, al tiempo que ha abogado por “volver a la senda de crecimiento de las exportaciones”.

El número de afiliados a la Seguridad Social de la industria alimentaria ha crecido un 2,9% en 2018

No obstante, se mantiene un saldo comercial positivo por valor de 8.025 millones de euros, acumulando así 11 años de superávit en la balanza comercial. En este sentido, España escala un nuevo puesto en el ranking exportador y se sitúa como la cuarta economía de la Unión Europea (UE) tras superar a Italia.

Dos tercios del total de las exportaciones se destinan a la UE que se mantiene como nuestro primer socio comercial, encabezado por Francia (4.783 millones de euros) y seguido de Italia (3.642 millones), Portugal (3.413 millones), Reino Unido (2.037 millones) y Alemania (1.857 millones). Fuera de la UE, Estados Unidos se destaca como primer destino extracomunitario, alcanzando un valor de 1.728 millones de euros, por delante de China con más de 1.067 millones.

Por categorías, García de Quevedo ha recordado que los productos derivados del cerdo siguen liderando la clasificación de exportaciones, pero que en el último han sufrido un ligero descenso. Asimismo, el aceite de oliva ha caído un 16% por la volatilidad de los precios, mientras que las aceitunas han descendido un 4% debido a los aranceles en Estados Unidos.

Estancamiento en la producción
Por otro lado, la industria de alimentación y bebidas también ha sufrido un estancamiento en lo que a producción se refiere, con un valor de 116.890 millones de euros al cierre de 2018, lo que supone prácticamente un crecimiento plano (+0,1%) respecto al año anterior. No obstante, se trata del quinto año consecutivo en el que el sector registra un saldo positivo en su producción real.

La industria de alimentación y bebidas se mantiene como primer sector industrial de España, de tal forma que su actividad supone el 3% PIB nacional y representa el 16% del conjunto de la industria española. De hecho, el sector ha ampliado su valor añadido bruto un 3,4% más que en el ejercicio anterior hasta alcanzar los 30.847 millones de euros.

En cuanto al consumo, el gasto en alimentación superó de nuevo los 100.000 millones de euros en 2018, correspondiendo el 65,8% al consumo dentro del hogar y el 34,2% a la participación de hostelería y restauración.

García de Quevedo: “Se empiezan a vislumbrar síntomas de ralentización y cierta debilidad en el contexto económico global”

Parte de este crecimiento se debe a que en 2018, la industria de alimentación y bebidas ha mejorado su dimensión constatando un significativo aumento del 8% en el número de empresas, el mejor registro obtenido en los últimos diez años. Así, la suma de 2.324 nuevas incorporaciones ha permitido consolidar un tejido empresarial más robusto que ya cuenta con un total de 31.324 empresas.

Este importante avance en el número de operadores también se ha reflejado en el progreso de la dinamización del sector, que ha mejorado su estructura empresarial con respecto a 2017 al verse incrementado hasta en un 14% las grandes empresas que corresponden a más de 500 asalariados.

Otra buena noticia para el sector ha sido el empleo, cerrando el año con un total de 426.300 afiliados a la Seguridad Social, lo que supone un incremento del 2,9% respecto a 2017, continuando así con la tendencia ascendente consolidada en los últimos cinco años.

En este sentido, la directora de Finanzas, Estudios Económicos y Talento de FIAB, Nelly González, ha destacado el ascenso del empleo femenino en el sector, donde el porcentaje de empleadas en la industria de alimentos y bebidas asciende al 37,2% y 28,5%, respectivamente. Además, este colectivo amplía su visibilidad sobre todo en el área de innovación, donde cerca del 46% del empleo generado en I+D es ocupado por mujeres.