Benoit Mocquant de L'oréal

infoRETAIL.- L’Oréal ha invertido más de 50 millones de euros para la transformación de su fábrica de Burgos en los últimos cinco años y espera invertir otros 50 millones hasta 2023, según ha asegurado el director de la fábrica de productos capilares de Burgos, Benoit Mocquant, en una visita guiada por sus instalaciones dirigida a los medios de comunicación.

Este es el camino que la compañía está siguiendo para ser una fábrica 4.0, o tal y como su director ha definido, para convertirse en un modelo de industria “híbrida”, donde la Inteligencia Artificial (IA) y el equipo humano coexistan para obtener más y mejor información. “La IA ayuda a predecir eventos y nos permite liberar energía a los empleados, ya que se les da información a tiempo real”, ha añadido Mocquant.

La compañía apuesta por el modelo de industria 4.0, donde la tecnología y el equipo humano se complementen

Ejemplo de esta transformación digital es que la factoría cuenta con siete vehículos autónomos sin conductor -Automated Guided Vehicle (AGV, por sus siglas en inglés)- que traen al operador todo lo que necesita a su punto de trabajo, como, por ejemplo, las materias primas. “Nos facilitan la vida”, ha subrayado Benoit Mocquant.

La fábrica, fundada en 1971, produce todo tipo de productos para el cuidado del pelo, principalmente para la división de Productos Profesionales, aunque también para las divisiones de Gran Consumo, Cosmética Activa y Lujo. En la actualidad, cuenta con 500 empleados en una superficie de 189.000 metros cuadrados y exporta a 52 países, 73% de los cuales son europeos.

“Economía circular, reciclaje y agilización de los procesos son algunos de nuestros objetivos futuros”, ha anunciado Mocquant, al tiempo que ha mencionado que el ritmo de producción de la fábrica ha sido “muy estable” desde hace cinco años.

Referencia sostenible
Además de la mejora operativa que está llevando a cabo en sus instalaciones, L’Oréal ha apostado por su desarrollo sostenible. “La fábrica de Burgos siempre ha sido pionera en respeto al medio ambiente”, ha apuntado el director, al tiempo que ha recordado que se convirtió en la primera “fábrica seca”, del grupo a finales de 2017, tal y como explicó la compañía el pasado mes de julio durante la presentación del primer informe de sostenibilidad. Este término se refiere a que el único consumo de agua que realizan es el que necesitan para la elaboración de sus productos y el de consumo humano, proviniendo el resto de un circuito cerrado de una planta de biodepuración.

En cuanto a eficiencia energética, la planta de Burgos es neutra en emisiones de dióxido de carbono. Además, cuenta con la central de trigeneración de biomasa que abastece de vapor, agua caliente, agua fría y electricidad a la fábrica y produce el 100% de las necesidades energéticas para su actividad de fabricación y envasado.

Estas instalaciones, de 4.000 metros cuadrados se encuentran en suelo de L’Oréal y aunque de momento solo abastecen a la empresa de cosméticos y belleza, se espera que más empresas del polígono industrial de Villalonquéjar (Burgos), donde está situada la factoría, se beneficien de su energía. La inversión total para su construcción fue de 14 millones euros, de los cuales dos millones corrieron por cuenta de L’oréal.

Puedes ver cómo es la fábrica de L'oréal en Burgos en nuestra galería fotográfica a través de este link.