infoRETAIL.- La IGP Ternera Gallega ha cerrado el ejercicio 2020 con crecimientos en el campo y en el mercado, respecto a los datos del año anterior. En concreto, ha alcanzado un volumen de carne comercializada de 22.562 toneladas en el ejercicio 2020, lo que significa un repunte en el mercado superior al 6% (1,3 millones de kilos más).
En relación al valor económico en primera venta de la carne comercializada, ha alcanzado los 126 millones de euros. Asimismo, el número de explotaciones ganaderas inscritas y activas ha aumentado hasta 8.354 (56 más que en 2019) y la cifra de terneros identificados ha alcanzado las 138.230 cabezas, un 2% más (2.967 terneros).
En lo referido al sector industrial, un total de 96 empresas están inscritas en la IGP, manteniéndose constante el número de mataderos y salas de despiece y comerciales cárnicas.
En cuanto al número de establecimientos con imagen corporativa de Ternera Gallega, la cifra ha crecido hasta 1.541 (125 más que en 2019). Esta subida responde al esfuerzo de la IGP para mejorar su penetración en la gran distribución, cadenas de supermercados y carnicerías tradicionales, sobre todo para mitigar los efectos del cierre de la restauración.
La IGP ha cerrado el año 2020 con un incremento tanto en el número de terneros registrados como en el de canales certificadas y volumen de carne comercializada
Desde Ternera Gallega aseguran que la entidad se ha mantenido como la Denominación de referencia en el sector de la carne de vacuno en España, donde significa alrededor del 56% de la carne comercializada con IGP.
En cuanto a la evolución de los precios en origen, han descendido significativamente, con menguas que han oscilado alrededor de 0,30-0,50 euros el kilo de canal en los meses de abril, mayo y junio, poniendo a muchas explotaciones en peligro de subsistencia. A partir de julio hubo una cierta mejoría, pero no llegaron a recuperarse en su totalidad los precios en origen a los niveles que había antes de la pandemia.
Por su parte, los datos de la IGP Vaca Gallega/Buey Gallego revelan que en su Consejo Regulador hay inscritas 1.014 explotaciones (89 más) y 32 industrias. La coyuntura derivada de la crisis sanitaria hizo que se ralentizara la actividad y sólo se hayan identificado 2.071 animales (1.820 vacas y 251 bueyes); y también que se haya estancado la comercialización, con 443 canales certificadas, que sumaron 186 toneladas de carne amparada por la IGP.
“Una vez que se supere la pandemia es fundamental la apuesta de los ganaderos e industrias para generar riqueza para el sector y para evitar, con el apoyo del Consejo Regulador, la picaresca comercial y el mal uso en el mercado y en la restauración del nombre de Galicia; una defensa en la que también se debe involucrar la Administración autonómica”, explica el presidente del Consejo Regulador de las IGP de Carne de Vacuno de Galicia, Jesús González Vázquez.
En cuanto a control de calidad, la entidad ha realizado un total de 21.777 inspecciones en la IGP Ternera Gallega en 2020, al tiempo que se han tomado 2.503 muestras y se han desarrollado 3.073 análisis y 1.654 pruebas de ADN. Por otra parte, en la IGP Vaca Gallega/Buey Gallego se han completado 569 inspecciones y 10 pruebas de ADN.
Nace la Certificación de Bienestar Animal Ternera Gallega
Por otro lado, el Consejo Regulador ha presentado la Certificación de Bienestar Animal Ternera Gallega, con la que avanza y define unas condiciones de bienestar animal más amplias y específicas para los terneros inscritos, detallando su sistema de control y certificación.
De esta forma, Ternera Gallega quiere dar respuesta a la creciente demanda de la distribución y de los consumidores, cada vez más preocupados por la crianza y el cuidado de los animales, y también situarse en la línea marcada por la Unión Europea en la estrategia ‘De la granja a la mesa’ prevista en la nueva PAC, para que la sociedad tenga acceso a alimentos que se obtienen cumpliendo altos estándares de seguridad, calidad y bienestar animal.
La nueva certificación comporta un mínimo de 66 parámetros, que en caso de incumplimiento pueden dar lugar a incidencias y no conformidades
La Certificación de Bienestar Animal Ternera Gallega se centra en la observación y evaluación de los animales y de su estado y comportamiento. Los inspectores del Consejo Regulador auditan el 100 % de las ganaderías e industrias inscritas en la IGP, y en el proceso de certificación se siguen los criterios de la norma UNE‐EN ISO/IEC 17065.
En total son al menos 66 parámetros, que en caso de incumplimiento pueden dar lugar a incidencias y no conformidades. En este caso, los afectados dispondrán de un plazo determinado para aplicar medidas correctoras y subsanar las deficiencias observadas. En caso de no hacerlo, perderían la Certificación de Bienestar Animal Ternera Gallega.
Por el contrario, su cumplimiento, avalado por el control del Consejo, va a permitir el uso de la mención Bienestar Animal Ternera Gallega en el etiquetaje de la carne, aportando seguridad y transparencia a los consumidores sobre el sistema de producción.
En consecuencia, una vez desarrollada e implantada la nueva certificación, en abril de 2021 llega al mercado la carne amparada por la IGP, también etiquetada con el logo de Bienestar Animal Ternera Gallega.
Para Jesús González Vázquez, esta iniciativa supone “un paso más en su esfuerzo constante por ofrecer a los consumidores las máximas garantías sobre el origen y calidad de la carne certificada por la IGP Ternera Gallega, y sobre su obtención mediante unos sistemas productivos donde el cuidado de los animales y el respeto de su bienestar es una cuestión primordial”.