El Blog del Retail

Carlos García

CEO y fundador de Urban Planet Entertainment

Conóceme
Cómo debe aprovechar un centro comercial el Black Friday
Los centros comerciales, gracias al 'Black Friday', tienen la oportunidad de mostrar a los visitantes más reacios que han cambiado. Sin embargo, la clave no es vender mucho un día, sino fidelizar clientela y aumentar la afluencia todo el año
22/11/2018

Llega la locura del Black Friday. Todas las tiendas se suman a esta fiebre de las compras de la que la gran mayoría de clientes se contagia. Los centros comerciales disparan su afluencia y las ventas se multiplican exponencialmente. Se trata de una fecha señalada en el calendario del retail, pero que corre el peligro de ser desaprovechada. Cierto es que las visitas a los grandes malls aumentan, pero ¿esto cambia la tendencia o es sólo algo efímero? Sin duda, el Black Friday representa una oportunidad de oro para que los grandes espacios de compras muestren a los visitantes cómo se están reconvirtiendo.

En los últimos años hemos visto como algunas de las grandes arterias de las ciudades decían adiós a viejos y hasta emblemáticos conceptos comerciales, dando la bienvenida al ocio al más puro estilo Broadway. También lo hemos visto con los clásicos mercados de abastos reconvertidos en espacios de gastronomía y de experiencia gourmet. Experiencia, sí, he aquí la palabra clave.

Se corre el riesgo de que una fecha tan señalada como el 'Black Friday' sea desaprovechada; las visitas aumentan, pero ¿es sólo algo efímero?

Algo así está ocurriendo con los centros comerciales que buscan dejar de ser clónicos. La oferta de los malls cada vez tiende más a diversificarse; sigue centrada en las compras, pero la restauración y el ocio son dos pilares sobre los que paulatinamente recae un mayor peso por parte de los centros comerciales. Las personas cada vez buscan más experiencias y el centro comercial si quiere ser un espacio recurrente en los planes de cualquiera de nosotros debe ofrecer todo un pack, una experiencia que vaya más allá del shopping.

Con el Black Friday, los centros comerciales tienen la oportunidad de mostrar a esos visitantes más reacios que no son los mismos de antes y que han cambiado. El objetivo es no sólo que pasen un buen día aprovechando las ofertas, sino que vuelvan y repitan. La clave no es vender mucho un día, sino fidelizar clientela y aumentar la afluencia durante todo el año a través de una oferta experiencial atractiva para todos, grandes y pequeños.

La celebración, el año pasado, del Black Friday y del Cyber Monday impulsó un 1,7% la afluencia a los centros comerciales durante noviembre, después de varios meses en negativo. Este año, de enero a octubre, la afluencia presenta una disminución del 0,5% interanual, solamente salvada por las rebajas puntuales en octubre unido a algunos puentes como el del Pilar.

Parece evidente que las tiendas tendrán buenas cifras de ventas y que un gran número de clientes pasará en estas fechas por los grandes espacios de compras. Sin embargo, hay una pregunta que los centros comerciales deben formularse: ¿Es suficiente con que las cifras de afluencia mejoren gracias a campañas puntuales como el Black Friday o hay que atraer público durante todo el año? La disyuntiva es fácil. Si los centros quieren números negros todo el año no hay que tener miedo al cambio. Reconvertirse puede ser muy muy divertido.