infoRETAIL.- Mercadona, Inditex e Ikea son las tres empresas del sector de la distribución y gran consumo con mejor responsabilidad y gobierno corporativo en España, según el estudio Merco Responsabilidad y Gobierno Corporativo 2017 que contado con la participación de 3.313 encuestados.

En concreto, la cadena de supermercados valenciana ha obtenido 9.426 puntos, superando a la multinacional textil (9.231) y la empresa sueca de hogar y decoración (7.919). Por detrás se sitúa Mahou San Miguel, con 7.733 puntos, dando paso a Danone (7.725), Calidad Pascual (7.657), La Fageda (7.646), Leroy Merlin (7.381), Nestlé (7.359) y Campofrío (7.192).

El quinto retailer de la clasificación es El Corte Inglés, que ha recibido una puntuación de 7.114 puntos. Inmediatamente después se sitúa Eroski (6.870), Heineken (6.767), Amazon (6.763) y Decathlon (6.706). El ‘top 20’ del sector lo completan: Coca-Cola (6.644), L’Oréal (6.538), Carrefour (6.374), DIA (6.063) y Grupo Damm (5.990).

24 firmas del sector de la distribución y el gran consumo están incluidas en el 'top 100' de la industria nacional

Entre los 100 operadores del ranking de toda la industria nacional también aparecen Procter & Gamble (5.987), Unilever (5.875), Mango (5.528) y Grupo Siro (3.000).

Las puntuaciones obtenidas se trasladan a una escala entre 3.000 (para la empresa que ocupe el puesto 100) y 10.000 (para la empresa con mejor puntuación). Casi una de cada cinco empresas incluidas en la clasificación global de España pertenece al sector de la distribución y gran consumo.

Para Merco, una empresa responsable y con buen gobierno corporativo es aquella que dispone de un buen comportamiento ético, esto supone tener mecanismos para gestionar incidencias éticas, la existencia de un comité o comisión de ética y una política escrita de anticorrupción; transparencia y buen gobierno a través de la implementación de determinadas políticas e informes de gobierno corporativo.

También debe contar con el compromiso con el medio ambiente y el cambio climático a través de la medición y gestión del impacto medioambiental; y finalmente, la contribución a la comunidad disponiendo de sistemas de evaluación del impacto social y de los requerimientos sociales necesarios para la cadena de suministro así como el desarrollo de programas con el entorno.