infoRETAIL.- España ha cerrado 2013 con 61.576 establecimientos de distribución, lo que supone 388 unidades menos que un año antes, es decir, un descenso del 0,6%, según los datos del informe Nielsen 360 presentado por la consultora esta mañana en Madrid.

El formato supermercado ha sido el único que ha registrado crecimiento orgánico durante el año pasado, hasta sumar 18.113 tiendas con superficies entre 2.499 y 100 metros cuadrados, es decir, un 2,5% más que en 2012.

En concreto, los supermercados grandes han incrementado su universo en 100 nuevas unidades y los de menor tamaño también han crecido en número fundamentalmente a través de la fórmula de franquicia.  

Los hipermercados han mantenido su cifra prácticamente estable en los 444 establecimientos (cuatro menos que en 2012). El resto de canales, han reducido su número de puntos de venta en el año 2013.

Por su parte, los establecimientos de cash & carry, aunque mantienen su número prácticamente estable en 2013, (647 establecimientos), también han acusado el descenso de las categorías de bebidas en su principal cliente que es la hostelería.

El avance del canal supermercado responde fundamentalmente a la tendencia de los consumidores a realizar más actos de compra en locales próximos. Está ganando terreno gracias a la tendencia al ahorro –más viajes de menor importe-, apoyándose también en la apertura de nuevos establecimientos. 

Los supermercados concentraron el 72% del gasto de los hogares con un gasto medio anual de 1.419 euros en este canal, un 2,1% más que en 2012. Los hipermercados han acumulado el 16% de las ventas en valor (-2,7%), mientras que, en el lado opuesto, los establecimientos autoservicios y tradicionales han copado el 6% (-7,4%) de la facturación total.

El canal especialista de perfumería/droguería también ha sufrido las consecuencias de la crisis: las Perfumerías Libreservicio han visto descender su número en casi 700 establecimientos en los últimos cinco años, mientras que las tradicionales perdieron unos 3.000 puntos de venta.

Marca de la Distribución
En el informe Nielsen 360 también señala que la cuota de la Marca de la Distribución (MDD) ha crecido en 0,9 puntos porcentuales en 2013 respecto al año anterior, situándose en el 38%. No obstante, su ritmo de crecimiento ha sido significativamente menor que en los años precedentes.

En este sentido, la actitud de los consumidores españoles ante la innovación sigue siendo abierta, especialmente si procede de marcas conocidas. Así, un 55% prefiere comprar productos nuevos de compañías habituales, mientras que a un 74% le gusta verse sorprendido con nuevos productos en el mercado. 

Además, un 53% de los consumidores estaría dispuesto a cambiar de marca y un 42% hace de altavoz de los productos nuevos que ha comprado, independientemente de la enseña que haya detrás.

“Detectamos dos comportamientos de los ciudadanos ante las novedades: un primer grupo muy numeroso que son fieles a sus marcas favoritas y para quien la compra de nuevos productos no es un hábito continuado; y un segundo grupo de ‘adopters’ siempre a la caza de las innovaciones del mercado y, por tanto, con una mayor predisposición a probar nuevos productos”, ha explicado el director general de Nielsen, Gustavo Núñez.

Asimismo, los españoles se muestran dispuestos a pagar un 10% más de media por los productos basados en el comercio justo, los responsables con el medio ambiente o aquellos fruto de la agricultura ecológica y que están dando lugar a la apertura de tiendas especializadas a pie de calle.

Por último, el estudio de Nielsen 360 también refleja que el consumo fuera del hogar se ha resentido, hasta el punto de repetirse la tendencia de los últimos años, lo que la consultora llama la ‘vuelta a la madriguera’. Se trata de una tendencia por la que el consumidor prefiere contener su gasto consumiendo en casa buena parte de lo que antes gastaba fuera. 

La principal consecuencia de esta transformación es que en el último año la hostelería ha perdido 6.923 establecimientos. Por categorías, la más sacrificada fue la de los bares y cafeterías, que ha visto desaparecer 3.063 locales, seguida de la del ocio nocturno, cuyo número descendió en 1.625 establecimientos (el mayor descenso en términos relativos), y de los hoteles y restaurantes, que se dejaron 1.316 unidades por el camino.